Independiente le ganó a Racing 78-76 en un partido de alto vuelo que se definió sobre el final. Alejo Toledo anotó 26 puntos en el Rojo, mientras que en la Academia no alcanzaron los 30 de Matías Núñez.

Cuando uno entra a la ciudad de Avellaneda, un cartel reza “La capital del fútbol” por la cantidad de equipos que participan de ese deporte. Este viernes, Avellaneda se convirtió en “La capital del básquet".

En el gimnasio Carlos Bottaro, Independiente recibió a su vecino, Racing Club, con una multitud que hacía años no se veía en la sede ubicada en Mitre 470, marcado por el folclore en los cánticos el público, que se portó de maravillas y vivió un clásico apasionante de principio a fin.

En un partido que comenzó durísimo, los árbitros revisaron una jugada en la cual Germán Franchino pierde parte de su dentadura y deciden expulsar a Matías Fernández de Racing. El trámite continuó áspero y parejo hasta el cierre, con ambos equipos haciendo esfuerzos por quedarse con el ansiado clásico de Avellaneda.

La incertidumbre prevaleció hasta el final. Racing tuvo en las manos de Matías Núñez, goleador del partido con 30 puntos, la última palabra del partido con la chance de empatar, pero la pelota no entró y se desató el festejo en Independiente, que se impuso 78-76 frente a su gente.

Por el lado del equipo dirigido por Jorge Seoane, que estuvo prácticamente todo el partido arriba en el marcador, sin perder paridad, el chaqueño Alejo Toledo fue la figura con 26 unidades y cuatro rebotes. También fue clave el aporte de Franco Actis (14 puntos y cinco asistencias) y el de Axel Kolano (14 y ocho recobres) para sostener al equipo vencedor.

Fuente: Prensa Independiente (Mariano Iglesias).