Pato trabaja junto al cuerpo técnico y médico de CAB para llegar en las mejores condiciones a los Juegos Olímpicos. Su rol en el equipo y por qué es tan importante tenerlo sano, explicado por Juan Gatti.

“Estoy bien, me siento bien de la cabeza y físicamente. El plan que tenemos con el cuerpo técnico y médico es ir de menos a más”. Desde Las Vegas, Patricio Garino trabaja día a día junto a kinesiólogos, entrenadores y preparadores físicos para que los Juegos Olímpicos de Tokio lo encuentren en plenitud. El marplatense, quien arrastra un largo historial de lesiones en los últimos años, conoce sus limitaciones, no se desespera y avanza de a poco hacia su estado ideal, aquel que demostró en China 2019 y que fue determinante para que Argentina alcance el subcampeonato mundial.

En aquel certamen, Pato no sólo completó los ocho partidos sin inconvenientes, sino que jugó un papel fundamental en la rotación de Sergio Hernández, siendo decisivo en el costado defensivo (promedió 1.5 robos), y brindando efectividad y regularidad en el lado ofensivo, donde sumó 8.1 puntos y 40% de eficacia en triples.

Sin embargo, desde China hasta hoy, el alero de 28 años atravesó distintas dificultades que le impidieron adquirir la regularidad que merece un jugador de sus capacidades para continuar desarrollando todo su potencial y talento. Entre el parate por la pandemia, lesiones y un positivo de covid en abril, sólo pudo completar 28 partidos en los últimos dos años, 18 con Baskonia y otros diez con Zalgaris, contando torneo local y Euroliga.

“Estando sano, Pato es uno de los tres mejores defensores del equipo junto a Facu Campazzo y Luca Vildoza, y uno de los cinco mayores referentes que tenemos. Es por eso que se le tiene esta consideración y se trabaja junto a él para que logre mantenerse sano. Es muy importante para el equipo”, explicó Juan Gatti, integrante del cuerpo técnico de Oveja, a Prensa CAB.

¿Cuáles son las capacidades que hacen de Garino una pieza determinante en la estructura de la Selección? “Está claro que es un especialista defensivo. Tiene una capacidad atlética y de lectura superior. En ataque es un jugador que no toma malas decisiones. Siempre decide correctamente lo que tiene que hacer, después depende de la efectividad que tenga, pero nunca toma malos tiros. Es extremadamente inteligente, me atrevo a decir que es uno de los más inteligentes del plantel”, desarrolló Gatti.

Desde el cuerpo médico de CAB indicaron que la intención es trabajar de forma alineada con el cuerpo técnico y el jugador para que, en esta preparación que se desarrolla en Las Vegas, Pato pueda ir de menos a más, y evitar que se repita alguno de los antecedentes físicos que padeció en el último tiempo. Para ello, se ideó un plan de trabajo que consiste en que distribuirle las cargas, conocer su respuesta, y avanzar poco a poco, acompañando al jugador hasta su estado ideal.

A 27 días del debut olímpico, y con tres amistosos en el medio, el formado en la Universidad de George Washington sueña con llegar afilado a Tokio y brillar ante los seleccionados más fuertes del mundo, como lo hizo en China, por ejemplo, con esa recordada actuación ante Serbia en la que aportó 15 puntos (tres triples) y dos recuperos. Para ello, sabe que debe ser paciente, trabajar duro y brindarse por completo al grupo de profesionales que lo rodean, quienes lo consideran una pieza esencial dentro del plantel.