En el estadio Osvaldo Casanova de bahía Blanca los más de 1300 jugadores y jugadoras de todas las edades hicieron realidad un nuevo récord: jugar 32 horas consecutivas, en la auspiciosa apertura de una nueva edición de la Fiesta Nacional del Básquet.
Finalmente, en partido “largo” y parejo,  el equipo Azul derrotó al Blanco por 2275 a 2229. Jugaron niños desde los 8 años, participaron muchas jóvenes y mujeres y un equipo de vecinos mayores de la ciudad marcaron el cierre de este nuevo récord. Fue entonces cuando se destacó Hugo Mansilla, quien con sus flamantes 83 años “traspiró” la camiseta blanca y hasta animó un par de tiros al cesto.

La Fiesta fue completa y las firmas de las autoridades presentes así lo certificaron. Norberto Dagheta, árbitro colegiado de Bahía Blanca, también “hizo historia” luego de dirigir todo el juego ininterrumpidamente, al igual que el pasado año lo hiciera su colega Marcelo Zabala.

Federico Susbielles, uno de los organizadores, manifestó su alegría y agradeció a “todos los bahienses que ya se apropiaron de esta Fiesta. Realmente la activa participación de la gente nos llena de expectativas para seguir pensando en futuras ediciones de esta propuesta. Si bien es un gran esfuerzo organizar jornadas tan extensas y con diversas alternativas, partidos, charlas y conferencias para seguir disfrutando de este deporte que tanto queremos y nos identifica, la gran respuesta recibida nos alienta a ir por más.”

“Quiero reiterar la convocatoria para lo mucho que resta: tanto para asistir al Parido del Recuerdo a beneficio del Centro Luis Braille, como para presenciar la definición del cuadrangular final de la Copa Argentina. Los precios son muy populares porque queremos a la familia de vuelta en la cancha”, sostuvo Susbielles, luego de la actuación del Grupo Universitario el cual, demostrando su profesionalidad y calidad escénica, le puso brillo y música a la clausura del PARTIDO MÁS LARGO… que otra vez, se jugó en la Capital Nacional del Básquetbol.

Pensa CABB