El base rosarino, que encara su tercer año en España, disputará esta temporada en la segunda división, cedido por Barcelona. Expectativas y aprendizajes luego de un año de experiencia y crecimiento.
Tiempo de cosecha para Juan Ignacio Marcos en Europa. Luego de haber realizado su mejor temporada como profesional en la filial del Barcelona, el base oriundo de El Coatí de Eldorado en Misiones, disputará la próxima campaña en la LEB Oro, segunda división del básquet español. Tras la confirmación oficial, ya se encuentra entrenando con el Força Lleida, al que llega en condición de cedido desde el club catalán. Su campaña comenzará el 10 de octubre, cuando enfrente como visitante al poderoso y recién descendido Movistar Estudiantes de Madrid.
La pasada temporada, el armador de 21 años promedió 8.2 puntos, 3 rebotes y 3 asistencias en 22 minutos por juego en LEB Plata, la tercera división. Disputó 32 partidos de los cuales 28 fueron como titular. Su desempeño fue de menor a mayor y su rol se expandió notablemente con el correr del año, hasta llegar a convertirse en una pieza fundamental en el tramo decisivo. El Barcelona B terminó quedándose con el ascenso a LEB Oro en el repechaje, luego haber caído en la final por el primer boleto. Pelear por un lugar, perder una final, explotar en playoffs y redimirse con el ascenso. La experiencia también representó un desafío mental y un reto para construir el carácter.
De todas maneras, el Barcelona decidió que, a pesar de haber conseguido el ascenso, su equipo no iba a participar de la LEB Oro. Sabiendo que la cesión al Lleida era un hecho tanto para él como para el senegalés Brancou Badio, el entrenador Šarūnas Jasikevičius lo citó para ser parte de la pretemporada con el equipo principal, plagado de estrellas como Nick Calathes, Nikola Mirotic y Cory Higgins. Allí sumó otra gran experiencia, ya que tuvo la posibilidad de entrenar con el campeón de la Liga Endesa y vigente subcampeón de la Euroliga, que tiene una de las plantillas más poderosas del continente.
¿Cómo ves esta nueva oportunidad para vos desde lo personal?
Creo que es una oportunidad muy linda para seguir creciendo y medirme en una liga de nivel superior. Lo veo como un crecimiento, por supuesto. Es subir un escalón y estoy muy contento de poder dar ese salto.
¿Cómo se dio la posibilidad de Lleida?
Hay un acuerdo entre Força Lleida y Barcelona, para las cesiones, y la verdad que lo veía como una linda oportunidad y en estos primeros días aquí lo estoy disfrutando mucho.
Tuviste la posibilidad de entrenar con el plantel principal del Barcelona en la pretemporada, ¿cómo te sentiste en ese período?
La verdad que muy bien, me fui sintiendo mucho más cómodo con el correr de los días. El nivel táctico, por sobre todas las cosas, es muy exigente. Hay que estar muy concentrado porque a lo mejor en una práctica tenés que aprenderte 15 jugadas nuevas.
¿Qué sentís que necesitás hacer o mejorar para poder ganarte un lugar en ese nivel en un futuro?
Seguir mejorando, sobre todo trabajar mucho la parte física más que nada e ir ganando confianza para afianzarme. Pero tengo que ir paso a paso, así que ahora mismo estoy con la cabeza aquí en Lleida para hacer lo posible para crecer en lo individual y ayudar al equipo. En cuanto a lo que quiero mejorar, por sobre todas las cosas, es el liderazgo. Sentirme el jefe es bueno sobre todo en una posición de base en la que estas todo el tiempo comunicándote.
Encarás tu tercera temporada en España, ¿cómo es jugar en el exterior?
Bueno, no es muy diferente a lo que se ve en todas partes. Al final siempre termina siendo básquet. Quizás haya algunas diferencias en la parte táctica, y un juego más estructurado. Pero me voy sintiendo más cómodo también con esto.
¿Qué esperás del equipo para la siguiente temporada?
Venimos trabajando muy bien, en los amistosos que jugamos nos vamos conociendo más, así que iremos paso a paso, pero veo un equipo intenso que va a luchar todas.