Tras la confirmación de la sede y los grupos del Preclasificatorio Olímpico, el entrenador argentino habló con Prensa CAB en la previa del primer paso por estar en los JJOO del próximo año.
Hace algunos días
FIBA anunció que el
PreClasificatorio Olímpico de las Américas se disputará en
Argentina, del
12 al 20 de agosto. Este torneo, con sede aún a confirmar, es el paso previo obligado para obtener el cupo que permitirá al campeón disputar el Repechaje Mundial el año próximo.
Enfocado en ese desafío,
Pablo Prigioni, entrenador de la
Selección Argentina, charló con
Prensa CAB sobre lo que se le viene al equipo nacional.
“Lo más importante es redireccionar los objetivos. Lo que todos queríamos para este año no está y tenemos que enfocarnos en este PreClasificatorio con la ilusión de buscar un lugar en el Preolímpico del año que viene”, comenzó diciendo el entrenador de 45 años.
Y amplió:
“Sabemos que la dificultad es máxima y es importante que todos tengamos el objetivo claro para este proceso doble: primero tenemos que conseguir este año el lugar para competir el año que viene en el proceso definitivo”.
“Es momento de dejar los lamentos atrás. Tenemos que entender la dificultad de lo que tenemos por delante y los sacrificios que hay que hacer para tener un lugar en París el año que viene”, agregó
Prigioni.
El oriundo de Río Tercero encarará su primera preparación de varias semanas como entrenador del equipo, recordando su inicio al frente del equipo días antes del debut en la AmeriCup de Recife que luego Argentina terminaría ganando, sumado al sistema de ventanas FIBA que no permite demasiados días de trabajo con grupo completo.
“La preparación va a ser clave. Este grupo de jugadores cuando prepara torneos con tiempo, tiene buenos resultados. Planificamos tres semanas, tres semanas y media de trabajo, que serán muy importantes. Buscaremos instalar el sistema de juego que pienso que necesitamos para que los jugadores den su máximo”, explicó.
Tanto
Prigioni como su grupo de trabajo saben que
“el margen de error es cero”. En relación a este aspecto, apuntó:
“Tenemos muchos jugadores de experiencia que pueden lidiar con eso y esperamos hacerlo bien”.
Argentina integrará el
Grupo A del
PreClasificatorio Olímpico FIBA de las Américas, compartiendo zona con
Cuba, Panamá y Bahamas. Los dos primeros avanzarán a semifinales donde se cruzarán con los clasificados del Grupo B compuesto por Uruguay, Chile, Colombia e Islas Vírgenes. El ganador de la final recibirá un boleto para uno de los cuatro Clasificatorios Olímpicos del año próximo, con fechas y sedes a definir.
“Sabemos cómo juegan los equipos de Centroamérica y el Caribe. Tienen mucho vértigo en su dinámica y son muy verticales. Tienen mucha influencia del básquet americano y tenemos que esperar a ver con qué jugadores vienen. Por momento se nos tornan incómodos y tenemos que estar bien preparados para enfrentarlos”, analizó el entrenador acerca de los rivales.
Un valor indiscutible de la Selección Argentina es el sentido de pertenencia que genera. El legado de los distintos jugadores y entrenadores que vistieron la camiseta a lo largo de los años genera un compromiso emocionante ante cada convocatoria. Y eso destacó
Prigioni:
“Los jugadores demostraron siempre su compromiso y espero poder contar con todos ellos. Este torneo está conectado con poder jugar el año que viene y ellos lo saben”. Además, el entrenador se refirió a algunos nombres que por distintas situaciones no pudieron estar en las últimas citaciones:
“Espero también que puedan sumarse los que nos faltaron en las últimas ventanas, como Luca Vildoza o Fran Cáffaro. Todos son importantes, necesitamos del compromiso de todos y estoy convencido que lo vamos a tener”.
El público argentino cumplirá un rol determinante alentando al equipo en cada partido y eso lo sabe el entrenador, quien señaló:
“Es importante jugar en tu país. Yo estuve muchos años en la Selección y el único torneo oficial que jugué fue el Preolímpico del 2011 en Mar del Plata. Siempre nos quedábamos con las ganas de jugar más en casa. Los jugadores lo tienen que disfrutar”.
“Ojalá que podamos hacer un buen torneo, en la ciudad que sea. La experiencia del último juego en Mar del Plata no tiene que empañar la experiencia de jugar de locales. Es una buena chance para todos de tener una revancha, con la dificultad que tiene por el margen de error nulo que hablábamos antes”, agregó.
Por último, manteniendo el foco en la planificación y explicando un poco más de los aspectos a trabajar, el exbase concluyó:
“Buscaremos armar una estructura de trabajo que con el resto de los asistentes pensamos que es la mejor. Sentar algunas bases, tanto ofensivas como defensivas, para poder desarrollarnos a partir de eso. Serán días muy importantes para darle sentido al juego del equipo, basado en la calidad de los jugadores que tenemos. Buscaremos que todos puedan dar su máximo, tanto individual como colectivamente”.