El básquetbol argentino recibió una hermosa noticia en la mañana del lunes: el alero de la Selección Nacional, Patricio Garino, firmó contrato para jugar hasta final de temporada en los Orlando Magic de la mejor liga del mundo. Será el 12° argentino en jugar en la NBA.

El básquetbol de nuestro país tiene un nuevo motivo por el cual sentirse sumamente orgulloso. Con apenas 23 años, el alero marplatense Patricio Garino, jugador de la Selección Nacional mayor, firmó contrato para jugar hasta final de temporada (finaliza el 12 de abril) con los Orlando Magic de la NBA. Esto significa que Garino tendrá cinco partidos por delante con la posibilidad de debutar en la mejor liga del mundo.

De todas maneras, si bien el contrato no está garantido, el joven talento argentino continuaría en Orlando la temporada 2017/18. Garino será entonces el 12° jugador de nuestro país en llegar a la NBA, luego de Pepe Sánchez, Rubén Wolkowyski, Emanuel Ginóbili, Andrés Nocioni, Carlos Delfino, Fabricio Oberto, Walter Herrmann, Luis Scola, Pablo Prigioni, Nicolás Brussino y Nicolás Laprovittola.

Tras su exitosa carrera en la NCAA, donde jugó 129 partidos a lo largo de cuatro años para los George Washington Colonials, Garino captó la atención de la NBA. Fue justamente Orlando el que primero apuntó al jugador argentino y lo invitó a jugar la Liga de Verano, en la cual el marplatense realizó una gran tarea.

Luego, el mismísimo San Antonio Spurs se interesó en el alero de la Selección Nacional y lo sumó a su plantel para disputar la pretemporada (la cual compartió con Manu Ginóbili y Nicolás Laprovittola). Si bien no fue contratado por San Antonio, el equipo comandado por Greg Popovich decidió mantener a Garino bajo su ala y lo designó a los Austin Spurs, su equipo de Liga de Desarrollo.

Allí, en la antesala de la NBA, Garino consolidó una gran temporada en la que mostró sus conocidas virtudes, pero además dejó ver una clara evolución en ciertos aspectos de su juego. Jugó 49 partidos (46 como titular) en D-League con promedios de 11.2 puntos, 3.4 rebotes, 2 asistencias y 1.49 recuperos de promedio en 29.2 minutos por encuentro.

Con paciencia, talento y determinación, Garino fue poco a poco concretando cada una de sus metas. Este seguramente será solo el principio de un camino en que el jugador de Selección Nacional, que ya se encuentra instalado y entrenando en Orlando, continuará rompiendo barreras, superando sus límites y sorprendiendo a todos a su paso.